La hora había llegado para comenzar con los tan esperados Exámenes Chunnin, quizás no el mejor momento para iniciar ya que yo tenía ganas de ir al baño para hacer mis necesidades fisiológicas, sin mucho que decir observe la entrada al domo gigante, una entrada bastante disminuida en tamaño exacta para las medidas de un Shinobi, cargaba una pequeña mochila del mismo color que mi vestimenta, negro en su totalidad, esta mochila traía más que nada comida y principalmente muchas manzanas. Ya se me habían dado las instrucciones de que debía entrar y caminar varios metros para encontrar a mi rival, no se me dijo nada del tipo de clima que enfrentaría así que decidí ponerme mi mascara que cubría mi mentón, boca y una pequeña porción de la nariz, no sabía si el terreno estaría inundado lo que sería un problema. Al abrirse la puerta di mis primeros pasos, no literal ya que mis primeros pasos fueron de bebé pero eran mis primeros pasos para mejorar al mundo.

Una luz en el interior del domo me cegó por un par de segundos mientras ingresaba, movi mi brazo izquierdo elevando ligeramente mi mano a la altura de mis ojos para cubrirme de la luz que parecía ser del sol o al menos eso esperaba, unos segundos después se escucho el cierre de la puerta, también la intensidad de la luz se había ido siendo ahora más agradable, baje mi brazo para poder observar el terreno al que sería enviado y quede atónito ante lo que presenciaban mis ojos...

Parecía más una especie de viaje para buscar la libertad en vez de buscar la guerra, la temperatura era agradable incluso era tan agradable que si yo decidiera esperar al rival desde la entrada el rival se perdería sumergido en la belleza de la zona, algunos sonidos extraños eran audibles entre los que se podían diferenciar eran más que nada pájaros, -Ah... Que bello- dije para continuar caminando, entre más avanzaba mejor era el estar aquí, el cielo parecía más azul que el que se ha visto en las afueras de Kumogakure a pesar de que Kumogakure es una de las aldeas con más elevación y una de sus principales caracteristicas es el que siempre pueden ver el cielo despejado, mientras más caminaba más me gustaba el lugar, era como haber llegado al cielo sin necesidad de haber muerto, un sentimiento de paz que no existía en la vida real, sumergidos en mi aldea por la guerra que ya había concluido lo único que yo escuchaba todos los días eran llantos, quejas e insultos, así que era muy agradable el encontrarse con esta paz aunque sea por unos momentos y aunque sea artificial.

Mis ganas de ir al baño no paraban y lo peor de todo es que ya me estaba empezando a dar hambre, no tenía muchas opciones solo dos, tome la opción más inteligente a mi parecer, me detuve al lado de un árbol muy hermoso con varias flores en su alrededor y posteriormente abri mi bragueta del pantalon, dije sin muchas ganas y con un poco de pena -Una disculpa señor árbol, pero es una necesidad- entonces unas pequeñas gotas amarillas chocaban con las flores y luego cuando parecía haber acabado aumento la presión y las gotas se volvieron una especie de río, al estar aliviado cerre mi bragueta y continue caminando, no había pasado mucho tiempo desde mi entrada al domo, quizás menos de una hora, tenía un rato caminando en linea recta para encontrarme con mi rival, aunque siendo honestos yo prefería perderme por el paisaje pero era un lujo que por el momento no me podía dar, encontré el río que se supone era el punto de encuentro o al menos eso parecía ya que si avanzaba me volvería a sumergir entre los árboles y prefería esperar a mi rival, metí mis manos en el rio para lavarmelas un poco y posteriormente baje un poco mi mascara de respiración haciendo que colgara de mis orejas para que no se cayera, me quite la mochila y la abri con algo de lentitud para así sacar una manzana aunque luego lo pensé mejor y decidí sacar dos, cerre la mochila y la puse en el suelo a su lado puse una de las manzanas mientras yo empezaba a comer la otra, me quede parado por cualquier cosa no quería ser victima de un ataque por la espalda, al terminar la manzana puse lo que sobraba que solo era el centro a un lado de la otra manzana, mis cosas y yo nos encontrabamos a centimetros del río lo suficiente para que yo nadara un rato y si me daba hambre solo sacara una pequeña parte de mi cuerpo y estirando mi brazo alcanzaría mis cosas, -Bueno en lo que espero- sin más que agregar me coloque de nuevo la mascara de respiración e hice una posición de clavadista, claro luego de lanzarme era obvio que no era un clavadista cayendo de lleno contra el agua principalmente dandome en seco en el abdomen, saque la cabeza para poder observar mis cosas y luego de ver que no se mojaron me frote un poco el abdomen para que luego de unos momentos el ardor por el impacto cesara, escuche un poco de ruido que era más perceptible en el agua ya que se podía ver el movimiento del agua, ¿quizás ya llego el rival?, pero no, a varios metros a lo largo del río se encontraba una cascada bastante prominente aunque era algo que no me importaba mucho ya que donde yo me encontraba era la parte más calmada del río, sin ruidos, sin fuerza en el movimiento del agua, bastante calmado pero era algo entendible ya que todo había sido modificado, cerré mis ojos y me sumergí notando que el río tenía aproximadamente 5 metros más o menos de profundidad, era algo que había notado gracias a que me encontraba cerca de la orilla así que con mis medidas baje poco a poco tomando una aproximación de la profundidad, claro estar dentro del agua era tranquilo gracias a mi mascara de respiración que me facilitaba muchas cosas, al llegar a lo más profundo del río se podían sentir algunas piedras algunas chicas y otras de gran tamaño, mientras esperaba algún movimiento de la superficie me senté sobre una de las rocas más grandes en las profundidades del río y así espere con calma la llegada del otro Shinobi o Kunoichi.

El momento para que Koneko diera lo mejor de ella había llegado, los exámenes Chunnin caracterizados por su dureza y dificultad ya estaban a segundos de dar comienzo, Koneko se encontraba frente a su puerta de entrada al domo, un domo tan extenso que no se lograba ver el final, la puerta se abrió pero se mostraba como una caja no una puerta de entrada y salida y dentro de la caja había otra puerta, las instrucciones y un poco de información ya le habían sido dadas, destacando más que nada la apariencia de vestimenta negra en su totalidad de parte de su enemigo y que tenía que caminar en linea recta hasta encontrarlo, el único detalle que se le estaba escapando era el nombre del enemigo, cosa que ella no quería saber de parte de los instructores quería saberlo de parte de su contrincante, ella se encontraba bien arreglada como todos los días, su clásico uniforme de la familia, su katana en la cintura, la bandana de Otogakure que destacaba en frente, y una agregada bolsa que llevaba en su espalda la cual contenía una botella vacía, pocas piezas de pan y una que otra cosa extra, la puerta a espaldas de Koneko se cerro, ella observo sin mucho animo la puerta que se encontraba frente a ella y lentamente comenzó a abrirse, Koneko dio unos pasos para salir de la caja y al salir y encontrarse en el terreno de combate la puerta se cerro, -Entonces... aquí comienza- camino lentamente por el terreno, un terreno que la verdad le sorprendía porque parecía cómodo, demasiado. Algunos árboles que no eran de gran tamaño se encontraban alrededor, aunque lo más interesante era ver unas especies de montañas a los lados que limitaban el camino, el viento apenas soplaba gracias a las montañas que cubrían la zona el viento era todavía un poco perceptible, el sol era cubierto por las montañas, las nubes podían casi tocarse, e incluso parecía que se podían escuchar algunas cascadas.

Koneko siguió caminando durante una hora o quizás un poco más, su paso semi lento le estaba costando trabajo para apresurarse aunque el tiempo era algo que a ella le sobraba y no tenía mucha prisa por encontrar a su enemigo, un dato interesante que no se le dio a Koneko era la apariencia del enemigo, quizás no se le dio esa información porque debido a que es un examen entonces solo se podría encontrar con una persona ya que en el domo solo se le permite ingresar a dos personas y por ende son enemigos, Koneko descansaba su mano derecha sobre el mango de su Katana por si algún movimiento extraño se hacía presente, no quería ser sorprendida con la guardia baja, a unos metros se podía observar una zona despejada, el césped era tan verde que parecía pintado, también vio el río, bastante hermoso por el movimiento lento del agua, y también por como brillaba mostrando que era fresca, había algo extraño en el lugar y era que en el otro lado del río en la orilla se podían observar unas cosas, una mochila negra, una manzana y restos de otra, era más que probable que estuviera el enemigo cerca, se detuvo en la orilla del río y se quito la bolsa poniendola en el suelo, observo su alrededor mientras se inclinaba pero nadie parecía acercarse por ningún angulo, Koneko saco la botella vacía de su bolsa y la sumergió en el río para poder llenarla, una vez que la lleno la saco y comenzó a beberla poco a poco para tener precaución de que no estuviera envenenada, obviamente todo esto lo hacía solo con la mano izquierda ya que no estaba nada confiada de haber encontrado una mochila en un lugar como este, destinado para los encuentros del examen. Koneko dejo la botella vacía en la bolsa y se levanto, su mano derecha no se quitaba del mango de su Katana porque se estaba haciendo presente el silencio que se vive antes de un combate. Por otro lado, el rostro de Koneko no mostraba nada, ninguna emoción, ni una sonrisa y tampoco un gesto de miedo, la mirada fría y típica de ella, esperando que algo pasara, se quedo observando la mochila negra pero no sin perder la concentración de su alrededor.

El tiempo seguía pasando y ya todo se estaba volviendo algo aburrido, la tranquilidad era agradable pero yo venía a enfrentarme a mi rival, observe la superficie elevando mi mirada, era bastante borroso pero se lograba ver como se metía y salía algo lo cual era muy extraño [Quizás ya llego, aunque si es un animal estaría bien, nada mejor que comer antes de pelear] me eleve con fuerza impulsandome con la roca en la que estaba, saque mi cabeza con lentitud para observar y definitivamente era mi rival, sali del río subiendo por la orilla donde se encontraba mi mochila la cual estaba al otro lado de la kunoichi, ya que ella se encontraba del otro lado me dio tiempo para levantarme, en esos momentos un silencio abrumador fue interrumpido mientras me levantaba dije -Ya me estaba aburriendo, mi nombre es Ryuk, veo que me mandaron una niña dime niña ¿Cual es tu nombre?- con un tono algo animado y dandole la espalda a mi aparente rival, estando de pie se podía observar en mi mano una manzana ya que era la que se encontraba en la orilla, con la mano opuesta de la que tenía la manzana me quite la mascara de respiración y la puse a un lado de la mochila, le di un par de mordidas a la manzana y la deje en el suelo, al terminar de tragar los pedazos de manzana dije un poco relajado -Veo que tienes una Katana, ¿te parece que fuera una batalla justa?, yo no tengo una así que estarías en ventaja y si ganaras no sería muy justo, fijemos unas reglas porque eres algo enana, te propongo que yo dejo mi mascara de respiración y tu dejas tu katana, ah y hablemos con la verdad ¿te parece?- mis palabras eran más que nada amigables ya que lo único que quería era hacer una especie de platica, al terminar con mis palabras puse mi dedo indice derecho sobre mi bandana en mi frente la cual señalaba que era de Kumogakure, junte mis manos y realice sellos lentos, -No te alertes, es solo por precaución, se que estoy siendo muy pregunton pero ¿tienes alguna trampa para mi?- mi cuerpo comenzó a iluminarse, claro por haber estado mojado un poco de vapor se hacía presente pero era escaso, con mi cuerpo totalmente iluminado se podían observar algunas rocas estas estaban bastante rojas, la iluminación se desvanecio dejando ver como todo mi cuerpo se encontraba rodeado de pies a cabeza de lo que parecía ser lava, manteniendo las manos juntas realice otros sellos pero esta vez los sellos fueron diferentes y ligeramente más rápidos, al concluir los sellos observe a la Kunoichi la cual parecía tener una bandana en su frente de Otogakure algo muy curioso, también fijandome en su cuerpo ya que parecía más una niña que una ninja y claro observando algunos otros detalles.

Todo había iniciado tranquilo pero para seguir avanzando y conseguir mi meta era necesario ganar el día de hoy, sabía que mis preguntas eran bastantes y que algunas eran más que nada por cortesia pero todas tenían un truco escondido, la sinceridad en una batalla es de respeto, los principios que me han enseñado todos estos años refieren a que siendo honestos la vida es más sencilla y que las personas que mienten siempre terminan en problemas, claro no hay que ser honestos en todo porque se pueden hacer mentiras "piadozas" pero mejor decir una verdad dolorosa que una mentira que iluciona, supuse que mis palabras aburrian un poco a la Kunoichi por ser rodeada de mis preguntas como si yo intentara evitar la batalla, así que me dispuse a decir unas palabras más para hacer esta batalla algo memorable, con un tono alto y con una ligera sonrisa dije -No te contengas, porque yo no lo haré, por cierto ¿Eres feliz?- una mirada alegre de mi parte mostrando sinceridad y confianza, aunque a veces eso no sirve de nada esperaba "romper el hielo" con aquella kunoichi que parecía ocultar sus sentimientos.

Momentos después de que Koneko tomara su posición para pelear un Shinobi salió del río, salió por la otra orilla donde se encontraban sus cosas, la distancia que los separaba de orilla a orilla eran apenas 7 metros, el Shinobi se presento hablando con un tono algo animado y preguntando el nombre de ella mientras le daba la espalda, -Así que una niña... mi nombre es Koneko- el tal Ryuk se quito una mascara que cubría toda la parte inferior de su rostro, y al quitarsela se podía observar su rostro que no era nada agradable mientras él mordía una manzana, volvió a hablar mencionando varias cosas pero antes de que Ryuk terminara de hablar Koneko se enfoco en lo que dijo... "Enana", el rostro de Koneko cambió su mirada sería y fría ya no era obvia, ahora su rostro mostraba enojo ante lo que consideraba un insulto sin importar el tono en que lo dijeran, manteniendo su voz calmada pero con gestos claros de enojo interrumpió -De acuerdo, acepto tus reglas- luego escucho claramente como dijo Ryuk "hablemos con la verdad" cosa que Koneko no entendía del todo pero mentir no era su fuerte, él señalo su bandana de Kumogakure, luego junto sus manos pero antes de que Koneko hiciera algún movimiento él volvió a hablar y entre sus palabras hizo una pregunta nada razonable "¿Tienes alguna trampa para mi?" ahora las dudas surgían en la cabeza de Koneko ya que no entendía todavía el porque preguntaba tales cosas, observo como el cuerpo de Ryuk se ilumino por unos momentos e inmediatamente su cuerpo se cubrió de lo que parecía ser una armadura -¿Lava?- esa armadura era bastante extraña ya que nunca había observado tal técnica, Ryuk no separo sus manos e hizo de nuevo sellos, ahora aprovecharía un breve espacio de tiempo Koneko para responder a su anterior pregunta -No, acabo de llegar- mientras tomaba la Katana que se encontraba en la funda de su cintura y la tiraba a un lado de ella sin sacarla de su funda, cerca de la orilla.

La forma incomoda en la que Ryuk miraba a Koneko no le agradaba a ella, con un tono algo molesto dijo -Pervertido- ahora una sonrisa se mostró en el rostro de Ryuk su enemigo, e hizo una pregunta muy extraña "¿Eres Feliz?" Acaso el Shinobi de Kumogakure estaba jugando con los pensamientos de Koneko o solo quería hacer conversación, -No- la mirada enojada de Koneko se torno fría y ahora se centro en los ojos de Ryuk para no perderlo de vista, las preguntas personales que estaba haciendo Ryuk ya no le estaban agradando a Koneko, junto sus manos para formar sellos, separo sus manos un momento y luego las volvió a juntar para formar otros sellos, -Preguntas demasiado- al terminar sus palabras cerro su mano derecha, dio un paso corto y parecía como si hubiera desaparecido en el aire, le podía observar como el agua del río se elevaba y se hacía a un lado ante la velocidad de Koneko que corría en dirección a Ryuk, sin pensarlo dos veces golpeo con fuerza suficiente el abdomen de Ryuk para mandarlo lejos, la fuerza que uso Koneko no era la suficiente para perforar el abdomen de su enemigo, pero al menos si la suficiente para poder traspasar la armadura a pesar de que Koneko sabía que sufriría quemaduras en su mano derecha.

Observe como mi rival la cual se hacía llamar Koneko tiraba la funda con la katana dentro a la orilla, aclarando que había aceptado mis reglas, ahora me enfoque en su cuerpo para saber las respuestas de ella observando detenidamente sus gestos y movimientos "No, acabo de llegar" las fluctuaciones de chakra en el cuerpo de Koneko no se alteraron por lo tanto me decía la verdad, ella se veía algo incomoda con como la miraba y escuche "Pervertido" mantuve mi sonrisa y susurre para mi mismo -No malinterpretes- ahora venía la última respuesta y dijo "No" su mirada que parecía enojada desde que le hable se torno de nuevo fría como cuando solo la observaba, sus fluctuaciones de chakra seguían siendo estables no había duda, una kunoichi muy honesta cosa que me agradaba, observe detenidamente como formo sellos suponiendo que vendría a atacarme, separo sus manos por un momento y volvió a hacer sellos ¿Quizás se había equivocado de sellos? pero no era muy probable, unas últimas palabras pude oír "Preguntas demasiado" en un abrir y cerrar de ojos la Kunoichi apareció frente a mi, el agua caía con rudeza y parecía verse como un vació causado por el paso de ella, [No me dará tiempo] pensé mientras observaba como preparaba su puño para impactarlo contra mi.

Hice mi cuerpo ligeramente hacía atrás para bajar un poco la intensidad del golpe y dije un poco desconcentrado en ese breve espacio de tiempo -¿En serio piensas golpearme a pesar de que uso... no dejo que yo terminara mis palabras y recibí el puñetazo en el abdomen, luego de salir volando 6 metros   mientras mi cuerpo dejaba de dar vueltas contra el suelo me levante, -En serio debes estar loca para atacarme con Taijutsu- dije un poco molesto, suspire y me calme pensé [Hay dos opciones, tiene mucha fuerza o solo puede usar Taijutsu, nunca pensé encontrarme a alguien que se atreviera a usar Taijutsu a pesar de que se quemaría] no se podía observar sangre en mi cuerpo gracias a la armadura que cubre todo mi cuerpo ya que a pesar de que no estaba usando mucho chakra para la armadura amortiguo todo el golpe y también gracias a mi movimiento, me quede razonando un momento lo que dijo antes de que no es feliz porque era una respuesta que la verdad yo no esperaba, la sinceridad en sus palabras me hacia dudar de mis habilidades como Sensor e incluso me hacía pensar que podía ser ella un Sensor y me estaba engañando, -Eres de pocas palabras, pero con tu mano quemada ¿que vas a hacer? ahora me has dado la ventaja- junte mis manos y realice sellos, corrí en dirección a ella mientras inhale y en mi exhalación salieron pequeñas bolas de fuego en dirección a Koneko, al terminar de exhalar cambie de sellos y al finalizarlos se podía observar como mi cuerpo se mezclaba entre las llamas confundiendo mi ubicación, al llegar a Koneko eleve mi brazo izquierdo preparando mi puño que envié directo a su rostro pero no sería mi único movimiento, mi brazo derecho se encontraba también preparando mi puño pensando en que si fallaba el primer golpe con el otro puñetazo le daría en el pecho.

El combate se estaba haciendo algo tardado y solo se podía mostrar fuerza bruta, Koneko aprovecho que Ryuk se levantaba para meter su mano en la orilla del agua del Río, para así detener un poco el ardor de sus nudillos, la quemadura en sus nudillos era de 2do grado ya que hubiera sido más grave si Ryuk no hubiera intentado reducir su daño, se levanto y movió ligeramente sus dedos para recuperar la movilidad un momento, pero entonces Koneko escucho "¿Que vas a hacer? ahora me has dado la ventaja" Ryuk corrió en dirección a ella lanzando unas pequeñas bolas de fuego y desapareciendo entre las llamas, un movimiento bastante interesante, Koneko decidió evadir una por una las bolas de fuego ya que eran pequeñas y su daño sería el mínimo más eso agregado la gran velocidad que mantiene, pero antes dijo -Hablas demasiado-

Koneko no es una kunoichi que tome mucho movimientos defensivos, ella es más de atacar y esperar que de resultado, una por una las bolas de fuego pasaban de largo, los movimientos sencillos de Koneko eran lo suficientemente rápidos para evadir todas, pero entre las llamas se pudo observar un brazo que iba directo a su rostro, Koneko flexiono sus rodillas para así agacharse con velocidad pero eso no sería todo, la otra mano de Ryuk iba en dirección al tórax de ella así que ahora daría en el rostro, Koneko aprovecho su gran velocidad para reaccionar en cuestión de segundos, elevo su brazo derecho y con la palma de su mano detuvo el impacto a su rostro, era obvio que le dolía, ya que el ardor de la lava es incomparable, aprovecho su posición y un poco la mano de su enemigo para que se impulsara hacía atrás con fuerza, de orilla a orilla Koneko volvió a quedar a 7 metros del enemigo, se hinco recargandose sobre su pierna derecha, metió la mano derecha en el agua del río para así evitar el ardor, ella junto sus manos para formar sellos, al finalizarlos un chakra Verde cubrió su mano izquierda y la puso sobre la mano derecha, poco a poco se fueron deteniendo las hemorragias capilares, detuvo el ardor por completo y solo quedo una simple quemadura de 1er grado en su mano, el chakra verde desapareció de su mano y las junto de nuevo para formar otros sellos, al finalizarlos arrastro su mano izquierda por el suelo, arrastrando tierra con ello, unos rayos azules rodearon esa mano, creando chispas con movimientos aleatorios bastantes hermosos, un chillido se podía escuchar parecía como si dentro de su mano hubieran mil aves, el suelo se destrozaba con el paso de su mano un poder increible no había duda que ella quería terminar todo, -Te presento el poder del... un breve espacio de silencio en el que solo se podía escuchar el chillar de los rayos fue creado por Koneko, que elevo su brazo para separar su mano del suelo y desapareció en segundos, de un momento a otro se encontraba a menos de 30 centimetros al lado de izquierdo de Ryuk, con su mano llena de rayos azules sobre el pecho de él intentando atravesarlo por completo, el breve silencio fue interrumpido por un grito -¡CHIDORI!- ahora todo había acabado, esta técnica decidiría el ganar o perder y para Koneko solo existía el ganar.

Un rápido movimiento de parte de mi rival hizo que evadiera cada una de las bolas de fuego e incluso logro evadir mi primer golpe pero el segundo no, aunque solo le di en la mano, su velocidad es asombrosa, esta forzandose al máximo no cabe duda que no se esta guardando nada o al menos eso pensaba hasta que observe como un chakra verde se formaba en su mano izquierda, -Ese chakra... entonces eres una médico- el chakra verde que se formaba en la mano de Koneko ayudo a curar las heridas de su otra mano, no había duda ella era una médico, cosa que me sorprendió porque hasta el momento tenía pensado en que era una sensor, volvió a usar otro jutsu esta vez uno aún más raro, rayos se formaron en su mano creando un ruido muy molesto, chillidos como si la gente llorara sin parar, la fuerza de su técnica era obvia ya que arrasaba con el suelo que tocaba, suspire lentamente mientras el chakra en mi armadura aumentaba, brillando como si fuera el sol ya que supuse que esa técnica sería demasiado peligrosa y cuando logre observar ella ya se encontraba a mi lado con esos rayos sobre mi pecho sin importarle de nuevo mi armadura, ¿Acaso este era mi final? ¿Quizás ya no hay nada que pueda hacer?

Mientras me movía lentamente a mi izquierda entonces dije con una voz algo baja solo para que los oídos de Koneko y los mios pudieran escuchar -Así que, Chidori- el impacto fue directo a mi pecho y claro, me atraveso. Pero me dio en el lado derecho de mi pecho es decir sin afectar al corazón solo a uno de los pulmones, quede paralizado, sin importar todo el chakra que use mi rango no era suficiente para defenderme de un ataque tan directo, y quizás si ella hubiera estado más lejos me hubiera defendido mejor, mi cuerpo quedo inmovil, cruce mi mirada con la de Koneko mientras también su brazo izquierdo era rodeado por la lava que se encontraba en su punto de calor más alto, tome unas bocanadas de aire y dije -Yo, no puedo perder... todavía no se... cual es... mi... propósito para vivir... yo solo... quiero... proteger... al mundo- tome con ambas manos el brazo izquierdo de Koneko que se encontraba atravesandome, en esta posición y con tanto chakra perdido era lo único que podía hacer al menos llevarme su brazo intentando derretir su brazo con lo que quedaba de lava, poco a poco el manto de lava que me rodeaba desde el comienzo perdió brillo y se fue cayendo, la armadura se estaba desarmando, al notarse por completo mi rostro mostraba todavía una sonrisa mientras un par de lagrimas salían de mis ojos, todo callado, el viento dejo de soplar, el río se detuvo, el caer del agua de las cascadas se dejaron de escuchar, mientras sostenía el brazo de Koneko tome otra bocanada de aire la cual quizás sería la última, dije -Al menos fuiste honesta desde el principio, gracias por esta experiencia- no todos los días se conoce a alguien sincero, mis sospechas de que era una sensor estaban en lo incorrecto, era una médico y los médicos son destacados por su honestidad, ella era una digna oponente y me alegro de al menos haber conocido a una persona sincera, porque a pesar de que se encuentre en otra aldea y que nunca nos conocieramos me agrado, me hace pensar en que el mundo todavía tiene salvación.

El final de la batalla llego, Koneko perforo el tórax de Ryuk, dañando al pulmón, la caja torácica, todas las arterias y venas que se encontraban en su lado derecho, lo que todavía Koneko no entendía era el porque Ryuk se forzaba a hablar, dijo unas palabras muy extrañas y Koneko se enfoco en "Todavía no se cual es mi propósito para vivir" y "Proteger al mundo", al parecer había bondad en el corazón de aquel shinobi de Kumogakure que a pesar de estar agonizando mostraba una sonrisa cosa que era difícil para la joven de cabello blanco, Ryuk tomo su brazo izquierdo que se encontraba perforandolo, la lava estaba al máximo, el brazo de Koneko se separo del cuerpo de ella, quedandose en las manos de su enemigo, ella sentía dolor pero su mirada fría y sería seguía dominando, luego de que lograra arrancarle el brazo la armadura de Ryuk se fue deshaciendo poco a poco, pedazo por pedazo, Koneko observo el rostro limpio de Ryuk que todavía le parecía desagradable con una enorme sonrisa y con unas lagrimas, ella miro detenidamente como Ryuk caía de espaldas contra el suelo, ya tenía la mirada perdida por la perdida excesiva de sangre, y dijo por último "Al menos fuiste honesta" y le agradeció a ella por la grata experiencia. Koneko derramo solo una lagrima mientras se arrodillaba frente al cuerpo del que era su enemigo, el viento comenzó a soplar moviendo el cabello blanco de la kunoichi de un lado al otro, así es la guerra, ves morir a los desconocidos y lloras por ellos.

Entonces Koneko fijo sus ojos en el rostro de su adversario y recordó todo desde el comienzo de la batalla, recordó como con cada palabra que decía Ryuk daba una sonrisa mostrando de cierta forma su amabilidad, como él estaba animado, como él parecía despreocupado, "¿Eres Feliz?" una pregunta que le hizo Ryuk a Koneko fuera del tema de conversación, fuera de lugar, fuera del ambiente de pelea, hasta entonces ella no se había dado cuenta del significado real de esa pregunta pero ahora lo entiende, se dio cuenta de que su respuesta fue seria, sin ningún sentimiento, un simple "No", que mostraba que su vida estaba vacía entonces podría pensar igual de Ryuk pensar también en ¿cual sería su propósito para seguir viviendo?.

Ahora tocaba decidir un par de cosas, la decisión podía ser o no buena, pero era un riesgo que se tenía que tomar, así es Koneko, tomando riesgos. Se levanto y cruzo el río agarrando su bolsa, regreso a donde se encontraba Ryuk desmayado por el daño y con pocos minutos de vida, tiro la bolsa al suelo a un lado de Ryuk y la abrió, saco su equipo médico de emergencias, un par de vendas, apositos, alcohol desinfectante y crema para las quemaduras, el que solo tuviera un brazo hacia las cosas difíciles pero era necesario, primero se desinfecto lo que quedaba de su brazo izquierdo, abrió la crema y se la unto, luego tomo un aposito y lo puso donde se debía conectar el brazo, tomo la venda y la apretó para evitar que el aposito se cayera, cubriendo esa extremidad por completo, el vendaje había sido el adecuado, ahora tocaba ayudar a alguien más, la kunoichi de cabello blanco con un tono algo débil y sin animos dijo -Esto es un examen, no una guerra así que no debe ser tu final, al menos no ahora-

Koneko decidió no poner alcohol en la herida de Ryuk que tenía en el tórax ya que como es en los pulmones podría tener aún más problemas respiratorios, puso el aposito para evitar que el aire saliera de su cuerpo y puso el vendaje, oprimió lo suficiente para que el vendaje no se cayera pasandolo sobre el brazo izquierdo de Ryuk y su cintura, sin más que hacer guardo las cosas esperando que él sobreviviera, por desgracia Koneko no podía realizar sellos con una mano y no tenía suficiente chakra para llevarselo ya que había gastado lo que le quedaba en el Chidori a penas podía con ella misma, se levanto colgándose de nuevo su bolsa en la espalda, observo de reojo a Ryuk y mientras su cabello cubría sus ojos dijo con palabras suaves -Gracias a ti, Ryuk.- Koneko esperaba que alguien encontrara a Ryuk y pensaba en seguir consciente mientras caminaba de regreso a la entrada del domo.